Este es un libro polémico, problematizador y de mucha actualidad, dirigido básicamente para la enseñanza en secundaria.
Entre las ideas de este libro, plantea que la Educación ambiental es política, social, multidisciplinaria, humanista y ética (destaca, por ejemplo, la ética del bien común, de la participación democrática, de la restauración y reconocimiento de la diversidad ecológica y cultural). En una lectura veloz puede verse “El árbol de los problemas ambientales”, en cuya raíz figuran la “alta producción industrial contaminante”, la “inequidad en la distribución de oportunidades y riqueza” y el “consumismo/ consumo irresponsable”.
Entre los problemas ambientales globales menciona la pérdida de biodiversidad, el cambio climático, el adelgazamiento de la capa de ozono, la desertificación y la escasez de agua. Aclara a los docentes que “Es importante recordar que el sentido crítico del lector debe conducirle a seguir profundizando en los temas tratados".
Un libro para cuestionarnos, hacernos muchas preguntas incómodas frente a nuestros modelos de desarrollo y abrir debate en el embiente educativo.